Posiblemente los que hayais visitado Londres recientemente hayais visto esta escena en las alturas de sus cruces del centro. Big Brother is watching you, como se dice cada vez que uno ve una camara de circuito cerrado. Para desgracia de los londinenses, aparte de su big brother cronico, el que observa es el ayuntamiento con la ayuda de estas camaras instaladas a la entrada de la zona centro y barrios mas alejados del West End desde el año 2000. Una formula tan basica como cobrar un peaje de 8 Libras por quien ose adentrase a la city o los citados barrios entre las 7 de la mañana y las 6:30 de la tarde. La finalidad? pues logicamente descongestionar un centro masificado por vehiculos, con su correspondiente nivel de contaminacion de distintas indoles fomentando el transporte publico y beneficiando a los peatones.

A mas de un conductor londinense le entrara un repelus por el cuerpo al ver la queridisima C en blanco sobre un circulo rojo. Las protestas os la podeis imaginar, basta darse una vuelta por youtube o buscar foros en google para ver lo contentos que estan los que usan vehiculos motorizados de 4 o mas ruedas, excepto taxistas. Lo cursioso del caso? pues por arte de magia los atascos han desaparecido en su mayoria, y es que 8 libras = 12 euros = 16 dolares aprox. pican bastante en el bolsillo, un dia no, pero cada dia ya me contareis. El dinero recaudado se usa en subvencionar el transporte publico y ampliar los carriles bici, duplicando su longitud en solo 5 años.

Pues al alcalde Bloomberg parece que le ha molado la idea, y desde hace tiempo comienza a rondarle en la cabeza importar el sistema britanico, camaras incluidas a un precio de 8 dolares, haciendo paridad con la libra de paso, por suerte para los neoyorkinos!

 

Y yo sinceramente pues aplaudo esta idea, que supondra una reduccion de los coches que entran a la isla junto con un incremento del transporte publico y una mayor subvencion para estos. Lo que no creo que esten tan contentos son los propios conductores, en la nacion donde el automovil es el rey y el peaton su lacayo. La aplaudo aqui en Nueva York, en Londres, y en Madrid y Barcelona, ciudades que considero con un sistema de transportes publicos lo suficientemente maduros como para echarle agallas al asunto con medidas tan impopulares. Por cierto que el que escribe es uno de los sufridos conductores, todo sea por un planeta mas verde! 😉