junio 2008


Con esta ola de calor que empezamos a padecer vemos las cosas distorsionadas, vemos lo que no queremos y pasamos lo que realmente queremos ver. A mi también me afecta, y para eso rescato literalmente de la retina fotos congeladas en el tiempo. Nueva York de verano, Nueva York de invierno, y esas cuatro ciudades asociadas a las cuatro estaciones. Sin duda, estamos en la más inóspita.

Recientemente recibí un correo electrónico de Patricia M. que trabaja en Radio Nacional de España. El motivo no era otro que realizarme una entrevista sobre mi visión de Nueva York y como se veía la Gran Manzana a ras de suelo, vista con ojos de un español, para publicarlo en su programa «Otros Acentos» que también se emite por Radio Exterior de España. En ella participa también la directora de la oficina de Turismo de Nueva York en España, recientemente inaugurada.

Pues bien, el lunes pasado la realicé, estuvimos hablando unos veinte minutos, bastante agradables, donde me hizo una serie de preguntas. Próximamente la subirá a Internet y pondré el enlace aquí. Pero el verdadero motivo de este post no es el inflar mi Ego, ni mucho menos, en esa entrevista me llamó la atención una pregunta tan simple como clara, ¿qué tiene Nueva York para ser un imán que atraiga a tantísima gente?

Para los racionalistas la respuesta es fácil, ante todo la relación euro-dolar es demoledora, por cada 100 dolares que gaste solo estaré gastando 63 Euros, lo que convierte a la Gran Manzana, cuna del capitalismo, en la Meca del Consumismo. Nueva York es sinónimo de compras, sinónimo de gastar por un tubo y si tus euros dan mas de si, pues bienvenido sea. 5th Avenue, Lexington, Macy’s, Bloomingdales, Century 21, J&R sin contar los Outlets de NJ son auténticas riadas de euro-turistas consumistas, auténticos expertos en cazagangas de Levis a 25 Euros cuando en la vieja Europa no bajan de los 90 Euros. Otro factor indiscutible es la mejora de las comunicaciones, hablando solo de España las dos grandes áreas metropolitanas del país se han llenado últimamente de vuelos diarios non-stop, bendita Delta Airlines, Continental y recientemente American Airlines que ha estrenado ruta Barcelona – JFK. A estas dos áreas se les unirá el próximo Jueves 5 de Junio la conexión Málaga – Nueva York, conectando el sur de la península directamente sin pasar por la tediosa T4 o el para mi peor aeropuerto del mundo sin duda, el Charles de Gaulle en Paris. Y parece que la nueva ruta pinta bien, el 70% de los billetes se encuentran vendidos hasta Septiembre, por lo que se divisan hostias y euros para hacerse con ese pastelito del 30% restante. ¿Quién dijo crisis? Pa’lante, como los de Alicante!

Y bueno, para los menos racionalistas, entre los que me incluyo, queda el romanticismo, ese halo que recubre Nueva York, esas señales que nos lanza la ciudad en casi cada esquina, serie o pelicula. Nueva York está de moda, la amas o la odias, pero es una ciudad que no deja a nadie indiferente, una ciudad donde no te sientes extraño, donde todos encuentran su hueco en el que encajar, donde no te miran raro por tu acento o tu color de piel, es una Ciudad de Ciudades, donde no solo se unen razas, etnias o idiomas, sino también generaciones y status sociales. Nueva York hay que vivirla con los cinco sentidos y ahora que la tenemos a tiro de piedra no creo que sea momento de desaprovecharlo.

Vive Nueva York, como rezán los anuncios con los que nos atacan últimamente, pero vívela con tus ojos y experiencia, no con los de otras personas.

V